Las zonas arqueológicas de México manifiestan la grandeza de sus culturas prehispánicas, que dieron forma a la historia, cultura y tradiciones del país. En cada rincón del pais encontramos la profunda influencia de estas civilizaciones antiguas que alguna vez habitaron el territorio.
Hasta el momento se tiene un conteo aproximado de 193 zonas arqueológicas distribuidas a lo largo del país. Sin embargo se cree que hay muchas que permanecen ocultas entre la selva o el asfalto de las grandes ciudades. Inspírate con la gran herencia de estas extraordinarias culturas y descubre México a través de sus enseñanzas. Estas son algunas de las zonas arqueológicas que no te podés perder.
1.Chichén Itzá en la Península de Yucatán
En la zona arqueológica de Chichén Itzá, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, se encuentra una de las “Nuevas Siete Maravillas del Mundo Moderno”: la majestuosa Pirámide de Kukulkán.
La misma se eleva con precisión geométrica en medio de una explanada que hace mil años fue el centro político, religioso y cultural del imperio maya. Chichén Itzá significa “boca del pozo de los itzaes”, en alusión al cenote situado al norte de la pirámide y que era considerado un enclave sagrado, además de una fuente de agua dulce esencial para aquella ciudad de templos y sabios astrónomos.
Chichén Itzá es una de las más famosas zonas arqueológicas de México. Conocida mundialmente por el juego de luz y sombra que en cada equinoccio ocurre sobre la escalinata del basamento piramidal conocido como El castillo. En este, el sol, conforme asciende sobre el horizonte, va iluminando la alfarda poniente del basamento, creando triángulos de luz y sombra que parecen descender hasta la cabeza de serpiente en el desplante de la alfarda. Este evento, logrado a partir de la correcta orientación e inclinación de los planos del basamento, manifiesta el gran nivel de conocimiento astronómico y arquitectónico que los Mayas poseían, y que ha dado lugar a ser una de las culturas y regiones más estudiadas en torno a estos temas.
2. El Vallecito, en Baja California
Hace más de 10 mil años, Baja California fue habitado por tribus de cazadores, recolectores y agricultores como la etnia kumiai. Ellos se asentaron desde el pueblo de Santo Tomás hasta las costas de San Diego, en California. Como legado de su paso por tierras mexicanas, dejaron un conjunto de 18 pinturas rupestres que conforman el sitio arqueológico El Vallecito, enclavado en La Rumorosa.
Seis conjuntos de pinturas y petrograbados están abiertos al público, mismos que se visitan por un sendero temático de dos kilómetros. Para complementar la visita, hay un museo de sitio con restos de antiguos fogones y fragmentos de cerámica hallados durante las excavaciones de la zona arqueológica.
3. Zona arqueológica Teotihuacán, Estado de México
La Ciudad Prehispánica de Teotihuacan (“lugar del endiosamiento”) fue uno de los centros urbanos más grandes del mundo antiguo, que llegó a concentrar una población mayor a los 100,000 habitantes en su momento de máximo esplendor. Situada en un valle rico en recursos naturales, Teotihuacan fue la sede del poder de una de las sociedades mesoamericanas más influyentes.
Subir hasta la cúspide de la Pirámide del Sol es no solo un acto de resistencia, sino de espiritualidad para muchos de sus visitantes. Por ese motivo, es común encontrarse con personas vestidas de color blanco durante el equinoccio de primavera, aunque también pueden verse en diferentes épocas del año, colocando piedras como cuarzos con la intención de cargarse de energía positiva y establecer un contacto místico con el dios Sol.
Dentro de la zona, también está el Museo de Sitio de la Cultura Teotihuacana, que expone piezas arqueológicas desde los instrumentos de la vida cotidiana, hasta algunas piezas de hueso, textiles o tallados en rocas.
4. El Tajín, en Veracruz
La palabra tajín ha sido traducida como “trueno” o “gran humo”, de modo que se suele denominar a este centro religioso y político mesoamericano como “casa del trueno”.
La zona arqueológica El Tajín fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, dada su importancia arqueológica, cultural e histórica.
La ciudad totonaca se extendía entre las cuencas de los ríos Cazones y Tecolutla, pero la zona explorada y recuperada hasta hoy abarca unas 10 hectáreas donde se levantan 40 edificios que en su época de esplendor estaban cubiertos de pintura mural.
La Pirámide de los Nichos es la más notable del conjunto y también la más estudiada por su particular diseño que incluye 365 nichos, uno por cada día del año. Otros edificios importantes son el Templo Azul, el edificio de Las Columnas y Tajín Chico.
El Tajín cuenta con un Museo de Sitio y, junto a la entrada, los voladores de Papantla realizan su danza ritual cada media hora.
5. El castillo de Tulum, en la Península de Yucatán
Este basamento se ubica en la orilla del mar y es una de las principales edificaciones que conforman la Zona Arqueológica de Tulum, una de las más visitadas de México.
El Castillo fue construido por los antiguos mayas, sobre un acantilado de 12 metros de altura sobre el nivel del mar, convirtiéndose en un punto estratégico de vigilancia para prevenir posibles ataques enemigos y guiar a los navegantes mayas que estaban en riesgo de impactarse contra el arrecife de coral que se encuentra frente a la costa de Tulum.
6. Zona arqueológica El Palenque, en Chiapas
Es una de las ciudades arqueológicas más interesantes de México, conocerla es descubrir el alma del mundo Maya; es entender mitos, rituales, creencias y admirar la arquitectura majestuosa de nuestros antepasados.
En una superficie de 16 kilómetros se levantan más de 200 estructuras arquitectónicas y construcciones. Se destacan: el Templo de las Inscripciones, el Gran Palacio, el Templo XI, los templos de La Cruz Foliada, del Sol y del Conde, así como el Juego de Pelota.
7. Ek Balam, en Yucatán
Ek´Balam (Estrella Jaguar) es una ciudad maya que tuvo su máximo desarrollo durante el Clásico Tardío/Terminal (600-850/900 d. C.) . El rey Ukit Kan Le´t Tok fue el constructor de la mayor parte del suntuoso palacio que actualmente conocemos como Acrópolis. Así mismo, fue impulsor de los avances técnicos y culturales, al igual que de la riqueza arquitectónica y decorativa. Se detaca la Estructura 35 Sub, localizada en el interior de la Acrópolis y conocida como Sak Xok Nahh (casa blanca de la lectura).
8. Zona arqueológica Paquimé, en Chihuahua
Paquimé significa en ópata “Lugar de Casas Grandes”.
Esta zona arqueológica de México antiguamente se perfiló como un centro regional de notables dimensiones, que llegó a tener control sobre un vasto territorio. Esta cultura logró adaptarse perfectamente al medio ambiente y el entorno económico. Los investigadores calculan que contaba con alrededor de dos mil recintos y que la población probablemente llegó a tener unos 3500 habitantes.
Paquimé sorprende con su peculiar urbanización, hecha a base de gruesos muros de adobe que proyectan un llamativo juego de sombras al ser iluminados por los rayos del sol.
9. Cholula, en Puebla
El símbolo sagrado de Cholula, la Pirámide Tlachihualtépetl ostenta tener la base piramidal más grande del mundo.
Arqueólogos e historiadores sostienen que su base podría alcanzar los 450 metros por lado, haciéndola cuatro veces más grande que la Pirámide de Giza, en Egipto. En años recientes, han descubierto en su interior algunos túneles que se intercomunican. Pero debido a sus dimensiones y complejidad arquitectónica, no ha sido posible ir más abajo, donde afirman que existen muchos más.
Es posible recorrer parte de estos túneles, 300 metros son los que se encuentran abiertos al público.
10. Xpuhil, en Campeche
Un recorrido por la Zona Arqueológica de Xpujil en México te llevará a un viaje en el tiempo cuando los antiguos mayas habitaban esta área hace 400 a.C. Se encuentra enclavada en la Reserva de la Biosfera de Calakmul y a pocos kilómetros de la frontera con Belice.
Es muy seguro que tu primera impresión de Xpujil sea la del Edificio 1, una construcción que sobresale de los vestigios con tres torres. Si te acercas, podrás constatar que dentro de él existían 12 cuartos con algunos pasajes y túneles para interconectarlos. Sus esquinas redondeadas y estoicas se niegan a perder sus formas frente al paso del tiempo. La Zona Arqueológica de Xpujil, concentra una veintena de asentamientos en los seis kilómetros que la conforman.
¡Inspirate con la gran herencia de estas extraordinarias culturas y descubrí todo el encanto de México a través de estos lugares increíbles!
Imágenes: https://www.inah.gob.mx/
Te puede interesar:
Destinos fuera de serie: Pueblos Mágicos de México
Playas de México: Cabo San Lucas
Puerto Morelos Mejor Destino de Aventura de México.
2 comentarios
Todos los que amamos Mexico nos maravillamos por su cultura ‘su gelgrafia y su pueblo
Definitivamente Miriam, gracias por tus comentarios!
Comentarios cerrados.