Creado por Andrea Camilleri para resolver los casos más extraños la ciudad Vigata en la también ficticia región de Montelusa su nombre es un homenaje al ya fallecido amigo del autor: Manuel Vázquez Motalbán.
Desde el año 99 cuando la RAI emitía el primer capítulo de la serie, el fenómeno no ha parado de crecer. Desbordó las expectativas e incluso al propio escritor, que a veces ha sentido la presión del personaje de ficción, interpretado por el actor Luca Zongaretti.
Capítulo a capítulo los personajes de la serie se han ido ganando la simpatía de los seguidores, haciendo que la región del sur de Italia, sea un motivo de consulta turística gracias al famoso detective. Todos estos lugares se reparten entre centenares de locaciones por todo Sicilia, especialmente en la provincia de Ragusa.
La columna de hoy de Travel Freaks, está dedicada a mi padre quién disfruta todos los domingos, a las 20:00 hs. por el canal Europa Europa, las aventuras de este comisario, que mezcla el estilo de la novela negra policial con un mundo surrealista formado por la “sicilianidad”, es decir, un modo de vida propio de la isla donde la vida y las relaciones sociales son únicas.
Si bien es cierto que el autor no nombra a qué ciudades hace referencia y que Vigata o Montelusa no aparecen en los mapas, es evidente que detrás de nombres como Fiacca (Sciacca), Fela (Gela), Muntiriali (Realmonte), Gaddotti (Giardina Gallotti), Raccadali (Raffadali) hay pueblos donde transcurren las tramas y aventuras del comisario.
La serie funcionó tan bien para el público italiano, que los lugares donde se grabaron las escenas de la serie empezaron a ser atractivos, siendo desconocidos para la gente del resto del país. De este modo surgió un tipo de turismo cinematográfico, que hasta ahora había quedado en exclusivo para la “Ruta del Padrino” de director Francis Ford Coppola.
Las autoridades sicilianas no desaprovecharon la oportunidad y muchos pueblos donde se han grabado escenas, cuelgan ahora orgullosos carteles que explican que parte de la geografía de los libros de Camilleri representan.
Para poder seguir las huellas del Comisario y encontrar algunos de los lugares reconocibles en la serie como la casa de Montalbano frente al mar, el restaurante de su amigo cocinero, o la comisaría, podemos contratar la ruta que nos acerca a estos y otros lugares.
La Ruta del Comisario Montalbano
La historia del comisario Montalbano está ambientada, como ya dijimos, en Vigata, una ciudad romántica que se identifica con Porto Empedocle donde nació Camilleri.
Al entrar en la ciudad, nuestros ojos leen Scicli, que es en realidad el pueblo donde se ubica la comisaría, sede del ayuntamiento. Desde allí paseamos por la Questura di Montelusa (que es el Palazzo Iacono de Via Mormino Perna), para luego tomar el coche hasta Ragusa Ibla, la plaza de Vigata con la Chiesa Madre, que en realidad es la Catedral de San Giorgio.
A la hora del almuerzo nos podemos dirigir al Restaurante San Calogero, el lugar donde habitualmente Montalbano come con Mimi. Para conocer y buscar donde está la casa de Montalbano hay que dirigirse desde Ragusa hasta la costa a Punta Secca donde enseguida reconocemos la morada del comisario (calle Aldo Moro, 44 ), con ese porche que mira a la playa y que tantas veces se nombra en los libros y la serie como Donnalucata (Marinella).
Otros de los lugares reseñables para los amantes de Montalbano es la Casa del capo Balduccio Sinagra, en realidad el castillo di Donnafugata.
Sicilia, la protagonista indiscutida
Toda Sicilia es un gran escenario donde ocurren momentos importantes de sus aventuras como el Mercado de La Vucciria en Palermo, Catania a la sombra del volcán, Mazara del Vallo, Tíndari, la reserva natural de lo Zingaro, Scopello o las islas de Mozia, las Egadi y Pantelleria.
El comisario es como buen siciliano es un enamorado de su gastronomía, descrita con lujo de detalles en los libros y que en la serie siempre hacen referencia. Resulta curioso que muchos restaurantes, cafeterías y hoteles hayan cambiado sus nombres para crear una nomenclatura que hace referencia al universo Camilleri-Montalbano.
Como decía Goethe cuando en su viaje alpino, “Sin Sicilia, Italia no deja ninguna imagen en el alma. Aquí está la clave de todo.” Y efectivamente, para conocer Italia, pero también Montalbano y el mundo de Camilleri hay que conocer Sicilia.
¡Hasta la próxima semana!
