El flujo turístico entre Latinoamérica y España vive uno de sus momentos más dulces, con indicadores de crecimiento que superan récords y reconfiguran el mapa de la conectividad y el gasto. Este dinamismo ha colocado a Madrid no solo como un estratégico punto de entrada al continente europeo, sino como un destino de alto impacto por derecho propio.
Para analizar este fenómeno, Felipe Formariz Pombo, Consejero de Turismo de la Embajada de España en Argentina, cuya jurisdicción se extiende además a Bolivia, Chile, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay, aporta una visión especializada y de primera mano. En el marco de actividades de promoción como la reciente focalizada en Madrid, Formariz Pombo subraya la importancia de la capital española en la estrategia regional.
Madrid: La ciudad que seduce al viajero del Cono Sur
Madrid se ha consolidado como el destino principal de los turistas argentinos y, por extensión, de gran parte de la región. Si bien su rol como hub de conexión aérea hacia España y Europa es incuestionable, el consejero destaca que la ciudad ha logrado trascender esa función para convertirse en un atractivo en sí mismo, apreciado por todos sus visitantes.
Existe una importante tasa de repetición entre los turistas argentinos. La clave, según el representante de Turespaña, radica en la proximidad cultural. Madrid es percibida como una “ciudad amiga”, un lugar con un espíritu similar a donde, en muchos casos, a los latinoamericanos les gustaría vivir.
“Lo que queremos es que el turista que va a Madrid viva la ciudad como una persona más de las que vive en la ciudad”, explica Formariz Pombo.
Este enfoque se centra en la autenticidad de la experiencia. Las autoridades buscan que el visitante conviva con el madrileño que disfruta del centro, generando un ambiente que el turista desde fuera agradece, ya sea en un restaurante o paseando por sus calles, diferenciándose de destinos enfocados exclusivamente en la masificación.
Reinventarse para “no morir de éxito”
Mantener este éxito exige una reinversión constante en la oferta. El gran reto de Madrid es, precisamente, vivir mucho tiempo de este auge sin caer en la saturación. En este sentido, Formariz Pombo hace referencia a las acciones del Ayuntamiento, como la nueva campaña “Te faltan calles”, que busca invitar al turista a explorar zonas no tradicionales de la ciudad, permitiéndole vivir una experiencia más genuina y de cercanía.
Además de la oferta cultural y de ocio habitual, la capital apuesta por grandes eventos como motor de atracción. La celebración de la NFL este año o la Fórmula 1 a partir del próximo, ofrecen excusas permanentes para visitar la capital. A esto se suma la promoción de la Comunidad de Madrid como un valioso punto de partida, permitiendo al turista disfrutar de los alrededores, pueblos, pequeñas ciudades y la montaña, todo a muy poca distancia, complementando la visita urbana.
Argentina, el motor de alto gasto en España
El análisis de las cifras de mercado confirma la explosión del turismo emisor argentino. En los seis primeros meses del año, el flujo de turistas hacia España creció un notable 27% en comparación con el periodo anterior. Pero el dato más relevante se centra en la calidad del gasto.
Históricamente, el turista argentino se distingue por un alto nivel de gasto promedio. A pesar de los desafíos macroeconómicos, Argentina se ha posicionado como el segundo país emisor en gasto y en número de turistas, solo por detrás de México. Esta solidez, impulsada por la mayor conectividad aérea y la apuesta de aerolíneas por ampliar rutas entre ambos países, promete seguir acortando las distancias.
Este dinamismo se refuerza con acuerdos binacionales. Existe un convenio de promoción cruzada entre el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y el Ayuntamiento de Madrid, lo que se traduce en campañas visibles en ambas ciudades. Pero, más allá de la promoción, la colaboración se extiende a un intercambio de buenas prácticas y conocimiento en la gestión urbana y turística.
La Región: Desafíos y oportunidades diversificadas
Si bien Argentina lidera la recuperación, la situación en el resto de la región presenta matices:
- Perú fue de los primeros países en recuperar sus niveles históricos, superando los 250.000 turistas anuales. El desafío en este mercado, más joven que el argentino o chileno, es diversificar los destinos fuera de la fuerte dependencia que aún tiene con la ciudad de Madrid.
- Chile se acerca a los 350.000 viajeros. Aunque su crecimiento se ha estancado levemente (posiblemente por la incertidumbre electoral), mantiene niveles muy altos y, al ser un mercado más maduro, ya reparte sus visitas entre diversos destinos españoles.
- Ecuador y Bolivia enfrentan mayores dificultades, tanto por la situación política/económica como por la necesidad de visado para ingresar a la Unión Europea. Estos mercados, más pequeños, necesitan estrategias focalizadas para superar estas barreras.
- Uruguay y Paraguay se comportan bien en relación con su población (40.000 y cerca de 15.000 turistas respectivamente), demostrando un interés sostenido.
Para el profesional del turismo latinoamericano, el mensaje de Formariz Pombo es claro: el reto es seguir comunicando la inmensa variedad de experiencias en los destinos españoles, entendiéndolas como un elemento de valor añadido y diferencial que el agente de viajes debe comercializar para sus clientes. El atractivo de España es inagotable y la demanda latinoamericana, sólida y con un alto poder adquisitivo, está lista para explorar más allá de la puerta de entrada.
