La industria del turismo de bienestar en Latinoamérica ha experimentado una transformación significativa en los últimos años, dejando de ser un nicho exclusivo para adultos mayores para convertirse en una propuesta integral para todas las edades. En este contexto, la provincia de Entre Ríos se consolida como el epicentro termal de Argentina, y dentro de su oferta, las Termas del Ayuí en Concordia destacan por una propuesta que armoniza la serenidad del agua terapéutica con la adrenalina del entretenimiento moderno, por ello dialogamos con Jose Spada y Lucrecia Pucheta.
Ubicadas en un entorno natural privilegiado, a pocos kilómetros del centro de Concordia, estas termas se distinguen por un modelo de gestión orientado a la experiencia del usuario y la versatilidad de sus instalaciones. Lucrecia Puchito, integrante del área de informes turísticos del complejo, destaca que la esencia del lugar radica en el aprovechamiento del recurso hídrico en un espacio totalmente al aire libre, lo que permite una conexión directa con el paisaje del litoral.
Una propuesta de doble perfil: relax y recreación
El diseño de las Termas del Ayuí está estratégicamente dividido para satisfacer dos necesidades fundamentales del viajero contemporáneo: el descanso profundo y la recreación activa. El complejo cuenta con un sector pasivo, donde las piletas mantienen temperaturas más elevadas, ideales para quienes buscan los beneficios mineromedicinales del agua termal y un ambiente de tranquilidad absoluta.
Por otro lado, el parque acuático ofrece un entorno con aguas templadas, diseñado específicamente para el público joven y las familias. La transición entre estas áreas es fluida, permitiendo que un mismo grupo familiar pueda disfrutar de experiencias distintas sin salir del predio. Esta segmentación es una respuesta inteligente a la demanda actual, donde el turismo de salud debe convivir con el ocio dinámico para asegurar la rentabilidad y el atractivo del destino.
Aventura y servicios: más allá del agua
Uno de los diferenciales competitivos que posiciona a las Termas del Ayuí por encima de otros complejos de la región es su oferta complementaria. Los fines de semana, el predio se transforma en un centro de turismo activo con la disponibilidad de tirolesa. Esta actividad cuenta con tres circuitos diferenciados, permitiendo que tanto jóvenes como adultos mayores —quienes a menudo se animan al desafío— disfruten de una perspectiva única del paisaje desde las alturas.
La infraestructura se complementa con dos restaurantes internos que garantizan una estancia confortable durante toda la jornada. Para aquellos que prefieren un estilo de turismo más tradicional y autónomo, el complejo dispone de un sector de parrillas incluido en el valor de la entrada, fomentando el clásico asado familiar que caracteriza a las escapadas argentinas.
El perfil del visitante: un alcance regional y binacional
Concordia, por su ubicación estratégica, atrae a un flujo de turistas diverso. Según los registros del complejo, los visitantes provienen mayoritariamente de la provincia de Buenos Aires, pero se observa un crecimiento sostenido de viajeros desde Chaco y el litoral norte. Sin embargo, el componente internacional lo aporta el público uruguayo, que cruza la frontera de forma constante para disfrutar de las ventajas competitivas y la calidad de los servicios locales.
La dinámica de acceso es otro punto fuerte. Al no poseer un límite de capacidad rígido en la actualidad, el sistema permite una rotación constante de visitantes. “Como va ingresando gente y a la vez se va yendo, el movimiento es indistinto”, señala Pucheta. Esta flexibilidad es clave para la optimización de los ingresos y la satisfacción del cliente, evitando las esperas prolongadas en periodos de alta demanda.
Compromiso con la accesibilidad y la inclusión
En términos de comunicación y responsabilidad social, las Termas del Ayuí demuestran un compromiso claro con la inclusión. El complejo aplica políticas de gratuidad para personas con Certificado Único de Discapacidad (CUD) y sus acompañantes, además de ofrecer tarifas diferenciales para jubilados y residentes locales.
Esta estructura tarifaria no solo busca la rentabilidad, sino que también fomenta el turismo social y el sentido de pertenencia de la comunidad de Concordia. En la actualidad, la entrada general se sitúa en 12.000 pesos, un valor competitivo considerando que incluye el acceso total a las piletas termales, el parque acuático y las zonas de parrillas.
Un destino para todo el año
A diferencia de otros atractivos turísticos que dependen de la estacionalidad, las Termas del Ayuí permanecen abiertas durante los doce meses del año. Sus horarios están diseñados para maximizar la experiencia del visitante: de lunes a jueves de 9 a 19 horas, mientras que los viernes, sábados, domingos y feriados el horario se extiende hasta las 23 horas, permitiendo el disfrute nocturno de las aguas termales, una de las experiencias más valoradas por los turistas.
En conclusión, el éxito de las Termas del Ayuí radica en su capacidad para integrar el bienestar con la diversión, manteniendo una infraestructura sólida y una política de precios inclusiva. Para los profesionales del sector, este complejo representa un modelo a seguir en la gestión de recursos naturales aplicados al turismo masivo con calidad de servicio.
