Todas las capitales tienen sus vistas clásicas, las cosas que no podés dejar de ver y hacer, y Copenhague no es diferente . Hoy te contamos sobre las atracciones y experiencias más emblemáticas de Copenhague, desde Nyhavn hasta Tivoli, Strøget y Amalienborg, para que puedas marcarlas en tu lista.Tivoli Gardens.
1. Tivoli Gardens: un parque de atracciones de clase mundial

Tivoli es la atracción más popular de toda Dinamarca por una razón. Más de 4 millones visitan el parque cada año y no es sorprendente considerando lo mucho que Tivoli tiene para ofrecer. Un maravilloso ambiente, los paseos salvajes, los restaurantes y los conciertos. Tivoli también está abierto durante las vacaciones de Halloween y otoño, Navidad y Año Nuevo y su nueva temporada de invierno en febrero.
2. Nyhavn: un clásico danés
El nombre de Copenhague proviene de las palabras para “Merchant Harbour” por una razón. Nyhavn solía ser uno de los centros de los comerciantes de barcos de antaño. Con sus coloridas fachadas, Nyhavn es una parada obligatoria. Aunque puede estar lleno de turistas de todos los rincones del mundo, encontrar un lugar en uno de los muchos lugares para cenar al aire libre suele ser fácil. Sentate a disfrutar de un sándwich y una cerveza fría mientras ves la gente pasar. La época navideña comienza con un acogedor mercado navideño en Nyhavn, el epítome de hygge.
3. Amalienborg: el palacio de la reina
El Palacio de Amalienborg es la residencia de la reina en Copenhague. El palacio consta de cuatro palacios rococó separados alrededor de una plaza, dos de los cuales están abiertos al público. Uno alberga un museo donde podés ver casi 400 años de historia real en forma de pinturas y otros objetos, y en el segundo se puede ver de cerca cómo es la residencia real danesa por dentro. No te pierdas el cambio de guardia que ocurre todos los días a las 12 del mediodía.
4. Strøget: la calle comercial de Copenhague

Strøget es la calle peatonal central en el centro de la principal zona comercial de Copenhague. Hay de todo: desde opciones económicas y pequeñas tiendas independientes hasta algunas de las marcas más exclusivas del mundo. Las numerosas callejuelas están llenas de tiendas, cafés y restaurantes para todos los gustos. Si deseas comprar un diseño clásico danés, podés visitar Georg Jensen, Royal Copenhagen o Illums Bolighus.
5. Tour por el canal: disfrutá la ciudad desde el agua

Cuando hace buen tiempo, un recorrido por los canales es una excelente manera de ver lugares emblemáticos de Copenhague. Subí en Nyhavn o cerca de Christiansborg y seguí un recorrido que te llevará más allá de la Ópera, la biblioteca Black Diamond y La Sirenita sentada en su roca. Continuá por los acogedores canales de Christianshavn, llenos de casas flotantes y bordeados de encantadores edificios antiguos.
6. La Torre Redonda: el mirador histórico de Copenhague
La Torre Redonda, construida en el siglo XVII, es el observatorio en funcionamiento más antiguo de Europa y es muy utilizado por astrónomos aficionados. Una vez que llegues a la cima a través de la rampa en espiral, verás una vista impresionante de Copenhague desde una plataforma de observación que rodea la torre. Los caballos solían arrastrar carros cargados con libros hasta la biblioteca de la universidad en la parte superior, de ahí la rampa en espiral en lugar de las escaleras.
7. Castillo de Rosenborg: una joya renacentista en medio de la ciudad

El castillo de Rosenborg es un castillo renacentista de 400 años de antigüedad ubicado en el centro de Copenhague. Además del hermoso exterior y el parque del palacio real, hay mucho por descubrir dentro del castillo. En el interior, se pueden ver tres leones plateados de tamaño natural vigilando, y no te pierdas las joyas de la corona danesa que solo puede usar la Reina y solo cuando están dentro de las fronteras del país.
8. Christiania: la ciudad libre de Copenhague
Christiania es una zona colorida y controvertida de Copenhague que definitivamente vale la pena visitar. El santuario se inició como un experimento social en los años 70, pero ha sobrevivido y es hoy un destino de excursión popular tanto para turistas como para habitantes de Copenhague. Hay varios buenos cafés y restaurantes donde pasar un rato y mirar la vida de la gente después de un paseo entre las divertidas y extrañas casas de Christiania.
9. La Sirenita de Copenhague: símbolo de la ciudad

La sirenita de Copenhague es uno de los símbolos más importantes, sino el que más, de la capital danesa.
La sirenita de Copenhague es una estatua de bronce de poco más de un metro de altura. Fue un regalo de Carl Jacobsen –fundador de la marca de cerveza Carlsberg– a la ciudad en 1913. Está situada en la bahía del puerto de la ciudad, sobre una roca de granito y cada año atrae a decenas de miles de turistas.
La estatua fue un homenaje a uno de los escritores daneses más importantes, Hans Christian Andersen, que dedicó su vida a escribir cuentos infantiles, incluyendo La sirenita, basándose en tradiciones locales.
10. Sándwiches: comida clásica danesa
Terminamos esta lista con un plato que es tan icónico como Tivoli o La Sirenita, a saber, el smørrebrød (suena como “smuurreh-bruuldt”). Probá este delicioso sándwich de cara abierta en uno de los restaurantes de Copenhague para el final perfecto de tu viaje. La parte más difícil puede ser elegir dónde comer, como el popular Aamanns o en Schønnemanns, uno de los restaurantes más antiguos de Copenhague.